RABAT (Reuters)- Al menos 2.000 personas se congregaron el domingo en una plaza de la capital de Marruecos para exigir que el rey Mohamed ceda parte de sus poderes a un nuevo gobierno electo, y que haya más independencia del poder judicial.
Algunos de los manifestantes llevaban banderas de Túnez y Egipto, en un reconocimiento de los levantamientos populares de esos dos países.
Policía uniformada se mantuvo a distancia de la protesta, en el área Bab El Ahad de Rabat, aunque había agentes de paisano mezclados con la multitud con libretas.
Analistas dicen que Marruecos, con un monarquía reformista que es bastante respetada, y una economía creciente, es uno de los países árabes menos probables a sucumbir en la oleada de protestas que recorren la región.
Entre los eslóganes que se coreaban en una protesta pasada por la lluvia se incluía: "El pueblo rechaza una constitución hecha para esclavos" y "El pueblo quiere el fin de la autocracia".
"Esta es una protesta pacífica para impulsar la reforma constitucional, restaurar la dignidad y acabar con los sobornos y la malversación de los fondos públicos", dijo Mustafa Muchtati del grupo Baraka (Suficiente), uno de los organizadores de la protesta.
Las protestas callejeras, iniciadas por el Movimiento 20 de Febrero para el Cambio, han atraído a 19.000 seguidores en Facebook, tras las revueltas en Egipto y Túnez. El movimiento también llama a que el rey saque a la coalición de Gobierno y disuelva el parlamento.
Las revoluciones, especialmente en vecino Túnez, han puesto el tema de una reforma constitucional de nuevo en la agenda tras la represión que siguió a atentados suicidas de 2003 y el surgimiento de un partido político liderado por un ex funcionario de seguridad cercano al rey.
En la víspera de la protesta, un movimiento juvenil marroquí dijo que se retiraba debido a desacuerdos con grupos islámicos e izquierdistas.
Aucun commentaire:
Enregistrer un commentaire